Comencé leyendo El camino, las aventuras de Daniel, el mochuelo, una historia que me emocionó y que recomiendo siempre como una de las joyas que no hay que dejar de leer. Miguel Delibes era un hábil narrador que disfrutaba con cada frase que escribía, o al menos así lo percibía yo. No era una autor de frases rebuscadas, ni subordinadas, muy del gusto, por ejemplo de Cela, otro maestro que me gustaba mucho. Buscaba la sencillez en la palabra, en mostrar la elegancia en cada historia que narraba.
Larga es su trayectoria como autor, pero yo me quedo con algunas novelas que me calaron muy hondo:
El camino, Los santos inocentes, Cinco horas con Mario, La sombra del ciprés es alargada, El hereje y Las ratas...
Sólo siento que a este autor no se le haya reconocido con el premio Nóbel de literatura.
Lo dicho, Daniel, el mochuelo, siempre me acompañará.
Una pena horrible :(
ResponderEliminarSiempre estará en su literatura!!
Oh, nunca lo he leído nombrar.
ResponderEliminarLuego me pondré a leer sobre él.
Me encanto el blog Anabel, por lo tanto, te sigo :)!
Un beso!
Es ley de vida pero ahun así da pena que se haya marchado.
ResponderEliminarSí, a mí me da pena que se haya marchado porque me gustaba mucho como escribía. Uno de mis libros preferidos es El camino.
ResponderEliminarPodemos afirmar que ha dejado un montón de lectores agradecidos por sus obras y un recuerdo muy fuerte en el corazón de muchos.
ResponderEliminarYo el año que viene leeré El Camino, y tengo ganas de probar la sencillez que le caracterizaba ^^
Me encantaba este hombre. Un gran escritor y un auténtico señor. Pero ya ha pasado a la posteridad
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