Hola a todos. Tras un fin de semana intenso, con blogger haciendo de las suyas, hoy os traigo mi crónica de la quedada de Sant Jordi.
Mis chicos y yo llegamos a Barcelona el jueves por la tarde y ya teníamos algunos compromisos a los que acudir. Esa misma noche estábamos invitamos a escuchar en primicia el nuevo disco de Nikosia, que os recuerdo que sale a la venta el 17 de mayo junto a Retrum, la nieve negra (Crónica AQUÍ).
El viernes 22 había amanecido lluvioso y había una prequedada, pero no acudí porque mi hijo se pasó casi todo el día en la cama con fiebre. Preferimos reponer fuerzas para el día siguiente, que iba a ser muy largo.
No sé si alguien rezó para que el 23, Sant Jordi, saliera el sol, pero el caso es que si alguien lo hizo fue escuchado tras los días de lluvia que habíamos tenido. Yo me levanté sobre las 7:30 pensando que eran las 8:30. Estaba tan nerviosa que no miré bien el reloj. Aun así llegué con el tiempo justo a la plaza de Cataluña, donde ya estaban casi todos los blogueros.
Nada más llegar me encuentro con “mis hijas” Sue y Dreamer y nos unimos en un abrazo fuerte, con mi “sobrina” Bella, con mi “hermana” Kat. Pero éramos muchos más: Miguel (y su inseparable puro), Álex, Matt (mi otro “sobrino”), Andvari, Aliesi, Xenia, Nebe, Stbn, Mike Selene, Maricarmen, Aran, Arantxa, Enaid, Patry,Pinkiland, Saru, Sedy, Esme, Becky, Estela, Minara, Sue, Khris, Niika, Lena, Mayu... Había muchos más, pero no me acuerdo de todos (Sorry).
Al poco de llegar nos fuimos dispersando por las distintas firmas. Barcelona estaba tomada por rosas, libros y gente con ganas de pasear y leer. Fueron muchos los que se fueron a la firma de Moccia, pero yo me había dejado mi libro en Valencia. Dreamer tenía ganas de conocer a Eloy Moreno y a que le firmara El bolígrafo de gel verde, así que allá que nos fuimos. Ya le comenté a Eloy que nos veríamos en Sant Jordi.
Más tarde había quedado con Carmen Fernández Villalba (autora de Luzazul) y con Isabel del Río (autora de La casa del Torreón). Al poco llegaron mi hijo y mi pareja. Nos saludamos, nos reíamos un rato y nos despedimos de Carmen porque había quedado. Dreamer se fue a que le firmaran su ejemplar de Colmillos y mis dos chicos y yo nos fuimos a desayunar con Isabel de Río. No me acuerdo donde nos llevaron su novio y ella, pero desayunamos―almorzamos muy bien.
Sobre las dos y media habíamos quedado en la Plaza de Cataluña con nuestros bocatas. Nos encontramos a unos cuántos blogueros en un Pans de las Ramblas y por fin pude presentar a mi hijo a su otra hermana, Sue. Al poco de llegar a la plaza apareció Javier Ruescas. Tenía muy poco tiempo para comer, pero no quiso perderse la quedada de los blogueros.
Una vez que acabó la comida Mike y Selene nos tenían preparado un concurso de preguntas. Al igual que en la quedada del año pasado en Madrid, me hicieron la misma pregunta, pero podía haber contestado casi todas las que hicieron. Cuando terminó la ronda de preguntas repartieron marcapáginas, rosas de papel, detalles de parte de Bella. Kat también repartió piruletas y repartió unos números para sortear unos libros.
Empezaban de nuevo las firmas de la tarde. Yo me fui con unos cuantos blogueros a hacer cola para Laura Gallego, pero después de estar más de tres cuartos de hora en la fila nos dimos cuenta de que sería imposible llegar. Decidimos al final irnos a otra cola que sabíamos que seríamos de los primeros.
Una vez conseguida la firma de Laura, me marché a buscar la firma de Care Santos. Allí estaban Bella y Becky guardando turnos. Creo que esto era de lo mejor de la quedada, siempre encontrabas a alguien haciendo cola que podía adelantarte unos cuantos turnos.
Tras estas dos firmas me fui a buscar a Blue Jeans, pero al final fue imposible que me firmara un ejemplar. Había tanta gente que la cola no corría y decidí saludarlo desde un lateral. Como siempre, Blue Jeans tenía una sonrisa de oreja a oreja y se disculpó por no poder atender a tanta gente como hubiera deseado.
Si hubo un autor que triunfó en Sant Jordi fue Albert Espinosa. Gracias a la serie Polseres Vermelles se había convertido en todo un fenómeno. Creo que ni él mismo se imaginaba toda la avalancha de gente que había en la cola.
Muchos blogueros fueron a apoyar a Álex y su novela Lágrimas de piedra, pero ya tenía mi ejemplar firmado desde la quedada de Valencia. Las firmas se acababan y yo decidí descansar. Me encontré a Bella y a Becky y poco a poco fueron llegando los demás. Cenamos, nos reímos, jugamos al teléfono loco y sobre las once de la noche nos marchamos mis dos chicos y yo.
El domingo por la mañana, muchos blogueros habían quedado para seguir haciendo turismo por Barcelona. Yo tenía cosas que hacer y dejamos el encuentro por la tarde. Sobre las 17:00 quedamos en la plaza Cataluña Javier Ruescas, Isabel del Río y todos los blogueros que se unieron a la post quedada.
Fuimos a una heladería donde seguimos hablando, bromeando y hasta se hicieron figuritas de origami. Finalmente la tarde caía y nosotros nos despedimos de todos los blogueros. Sé que las despedidas son tristes, porque nos llevamos a mucha gente de Barcelona y de Madrid en el corazón.
Los blogueros somos una gran familia. Estamos dando cuenta de ello en las quedadas que hay tanto en Valencia, Madrid, Canarias, Barcelona, Zaragoza… Y muy pronto la gran quedada: BLOGGER LIT COM. Nos vemos en el próximo encuentro.
Sólo me queda dar las gracias a Francecs Miralles por el maravilloso y largo fin de semana que pasamos en Barcelona, a Javier Ruescas por las risas que nos echamos, a Isabel del Río por sus historias y todos aquellos que compartisteis conmigo vuestros abrazos, achuchones y risas.