Conociendo un poco mejor a Nieves Hidalgo

Entrevista a Nieves Hidalgo

Hola a todos. Hoy os traigo una entrevista de una autora maravillosa, una faceta que también se refleja en su día a día. Se trata de Nieves Hidalgo.

Antes de nada me gustaría darte las gracias por conceder una entrevista a este espacio. Sé que en breve (el 3 de Febrero saldrá a la venta tu nueva novela: Hijos de otro barro, editado por Ediciones Zeta a un precio muy suculento). Para todos aquellos que nos hemos emocionado con cada una de tus historias, ésta es una muy buena noticia. Hijos de otro barro sería la cuarta novela en el mercado.

Debo decir que hasta hace casi un año las novelas románticas adultas no me interesaban lo más mínimo. Sin embargo no sé cómo llegué a la página de Nieves Hidalgo un buen día y decidí apostar por su primera novela publicada: Lo que dure la eternidad. Entonces me rendí al encanto de esta autora. Después vinieron Orgullo sajón y Amaneceres Cautivos, pero en su blog nos ha regalado dos novelas que nos ha mantenido en vilo durante mucho tiempo, Ariana y Brezo Blanco.

1- El género romántico se le ha considerado como un género menor dentro de la literatura y sin embargo es consumido por un gran número de mujeres. He encontrado a autoras de un nivel muy bueno, tanto que me han sorprendido. ¿Por qué crees que gusta tanto la novela romántica?

Ante todo, Anabel, soy yo quien te da las gracias por una presentación tan estupenda. Viniendo de alguien como tú, conocedora del medio, con un interesante blog y con algunas novelas juveniles escritas, resulta más emotiva.

La novela romántica gusta, simplemente, porque nos hace soñar y saborear la pasión, los sentimientos, la ternura y ¿por qué no decirlo? la sensualidad que hay en cada mujer. Nos sumerge en un mundo ficticio donde siempre acaba venciendo el bien. El que nos rodea es demasiado tortuoso y buscamos unas horas de felicidad.

2- Suelo leer en muchos diarios, e incluso lo he escuchado alguna vez en el telediario que la gente no lee, aunque ya supongo que la crisis también habrá afectado al sector literario. ¿Crees que después de leer este tipo de género literario la gente se atreve con otros géneros?

Según las estadísticas, es cierto que en nuestro país se consumen menos libros que en otros. Algunos ejemplares resultan caros y en esta época esa carestía se hace más patente. Sin embargo, las editoriales son conscientes y están lanzando libros a precios asequibles. Algunas, incluso, con formatos de calidad. A mi modo de ver, la novela romántica no está siendo víctima de estos momentos de crisis.

Yo distinguiría dos clases de lectores: los que dicen leer solamente literatura “seria” y las lectoras de novela romántica. En contra de lo que muchos piensan, las segundas –y segundos, que también hay-, no se ciñen a las novelas de aventura, sino que devoran toda clase de libros, ya sean históricos, policíacos o biográficos. Creo que alguien que comienza leyendo romántica, bien puede atreverse con cualquier otro género, porque incluso empuja a hacerlo. Hay muchas personas que están convencidas de que leyendo romántica no se aprende nada, que se trata de un género de segunda donde únicamente aparecen caballeros aguerridos y damiselas en apuros. Puede que antes fuera así, pero ahora rotundamente no. Las autoras se documentan y siempre existe en el argumento alguna escena –o muchas-, que nos enseñan algo. A modo personal, leyendo romántica he conocido datos de los que no tenía referencia. Una novela puede educarnos sobre los antiguos galeones, la vida en Irlanda o el azaroso día a día de los antiguos celtas. Y de ahí a buscar un libro de otro género, hay un paso.

3- Tengo la impresión que este género no ha caído, sino que en estos últimos años son muchos los títulos que son publicados. A pesar de que sigan un patrón muy parecido, ¿por qué crees que hay que darle oportunidad a este género? ¿Qué aporta este género?

La novela romántica lleva muchos años de andadura. Y ha cambiado, como la misma sociedad. Pero desde que se inventó la imprenta, se han publicado libros de este género. Sí es cierto que en la última etapa, las escritoras españolas han abierto brecha en los catálogos de las editoriales, que están apostando por autoras de aquí. De ahí que hayan saltado al mercado muchos títulos. Esperemos que cada vez sean más.

A la romántica no es que haya que darle una oportunidad, es que tiene todo el derecho del mundo a estar ahí, porque es un género que las lectoras solicitan y con tanto arraigo y peso como cualquier otro.

¿Qué aporta la romántica? Lo que cualquier otro libro que no sea de estudio: aventura, entretenimiento, solaz, intriga, misterio… Y como te decía antes, también cultura.

4- Se suele pensar que estas historias están muy alejadas de la realidad, que sus personajes son casi perfectos y que esos modelos no existen. ¿Crees realmente que estos modelos no existen, o somos las mujeres que idealizamos a nuestras parejas y no vemos realmente a la persona que tenemos delante?

Se puede decir que cualquier novela de aventuras se aleja un poco de la realidad. James Bond no existe, claro. Pero ahí está y nadie lo cuestiona porque no está dentro del género romántico. Un protagonista que no endulce, que no haga vibrar, que no enamore, no sirve, eso es evidente. Por eso se busca un modelo que llegue al corazón de las lectoras. Pero distan mucho de ser perfectos, porque sufren, tienen sus dudas, se equivocan y hasta se nos hacen, a veces, insoportablemente orgullosos. Los protagonistas de las novelas son un espejo de cualquier otro hombre, con sus defectos y sus virtudes. Eso sí, apuestos y atrevidos. ¡Faltaría más!

Las lectoras de romántica saben muy bien donde se encuentra la frontera entre la fantasía y la realidad. No es que idealicen o no vean a la pareja tal y como es. Distingue la realidad de la ensoñación y sabe que, cuando acaba de leer, regresa al mundo cotidiano, del mismo modo que cuando finaliza una película. Y seguramente por eso, porque es consciente de que una novela es solamente una vía para soñar, aprecia después más lo que tiene a su lado.

5- Si hay algo que me gusta de tus novelas son las mujeres fuertes que tienen un carácter muy marcado. Las damiselas ñoñas parece que no tienen cabida en tus novelas. ¿Responde esto a esa lucha de que las mujeres están preparadas para cualquier cosa? Nuestra independencia, en parte, es cosa nuestra ¿es así?

Me encanta plasmar en mis novelas mujeres con arrojo, es verdad. Y es que las damas delicadas y melindrosas nunca han ido conmigo. Se dice que las novelas son, en ocasiones, el reflejo de la personalidad del autor que la vierte en los protagonistas. No puedo negar que tengo un carácter fuerte, a veces impulsivo. Supongo que es inevitable que se lo transmita a mis protagonistas femeninas cuando les doy vida.

Y por descontado que la mujer está preparada para cualquier cosa. Lo está demostrando día a día, ya sea como ama de casa, como madre, trabajadora o profesional. A la mujer no le han regalado nada, se lo ha ganado con esfuerzo, tesón y valentía. Nuestra independencia es solamente cosa nuestra, desde luego. Y no sólo en parte. Es totalmente nuestro derecho y nuestra obligación.

6- ¿Qué hay de Nieves en esas mujeres tan audaces que nos describes, o te sueles inspirar en las mujeres que te rodean?

Alguna vez he dicho que yo invento los personajes, les doy vida, el color de cabello o el de los ojos, pero que luego son ellos mismos los que encauzan su camino. Inspirarse en las mujeres que me rodean es fácil, porque tienen las mismas agallas que mis protagonistas, pero éstas son fruto exclusivo de mi imaginación. Me cuesta trabajo conformar un personaje femenino secundario simplón, aunque a veces debo hacerlo debido al argumento. Pero me es imposible dotar a la protagonista de un carácter frágil porque no sé. Siempre acaba saliendo mi “yo” y claro, se rebela contra la injusticia.

7- Como autora de novelas románticas, ¿cuál crees que puede ser la clave que tiene que tener estas historias para que funcionen y atrapen?

Como ya he dicho, las novelas románticas tienen que ofrecernos aventura, misterio, sentimiento y pasión. Una novela sin esos condimentos es difícil que llegue a las lectoras.

8- Está claro que uno de los puntos álgidos de este género son las escenas de amor, ¿estamos tan “hambrientos” que necesitamos evadirnos de nuestra realidad?

La definición de este género ya lo dice todo. Romántico. ¿Qué es una novela romántica sin una buena escena de amor? Y las hay de distingos tipos, no todas son igual de intensas. Nos puede emocionar un simple beso, una caricia, una mirada, tanto o más que una tórrida noche de pasión desenfrenada. Hay escritoras que te envuelven con una sencilla palabra tierna y ya es suficiente para emocionarte. Y las hay que te describen una escena de pasión con más detalle y también te encandilan. Lo único que deben tener en común unas y otras escenas es forjarlas con respeto hacia el lector.

El problema no es que las lectoras estén hambrientas de sexo, ni mucho menos. Es más simple que todo eso: le gusta soñar, evadirse de la rutina diaria y sentir un tironcito en el corazón leyendo una escena apasionada o plena de dulzura.

9- En ocasiones he leído novelas con escenas de amor donde se utiliza un lenguaje un poco procaz, y a mí, al menos, en vez de meterme en esta situación, me ha sacado de la acción, ¿te pones límites a la hora de describir escenas de amor?

Es complicado escribir las escenas fogosas. El lenguaje ha cambiado también, como los argumentos y los protagonistas. Hay que adecuarse al mundo actual y eso lleva, a veces, a describir con demasiada claridad una escena erótica. Y la barrera que separa el erotismo de otro concepto más duro, es demasiado fina. Es muy fácil pasar el límite.
Para algunas lectoras una escena caliente con todo lujo de detalles resulta atrayente. Para otras, por el contrario, no.

Además, hay que procurar que esas escenas no sean repetitivas, que cada interludio sea distinto al anterior.

Por mi parte, intento que las descripciones sean lo suficientemente claras, pero sin utilizar vocabulario soez. Prefiero destacarme por las florituras a llamar al pan, pan y al vino, vino y resultar ordinaria, porque a un gran número de personas les pasa lo mismo que a ti, Anabel, que en una escena de amor, un lenguaje subido en exceso de tono, les saca de la novela o les descoloca. No sé si lo he logrado, eso deben decirlo las lectoras que son, a fin de cuentas, las que tienen la última palabra.

Muchas gracias por responder a estas preguntas. Te deseo suerte en todos los proyectos que emprendas. Te seguiremos leyendo en todas tus novelas.

Gracias a ti por darme la oportunidad de charlar contigo y de que los seguidores de tu blog me conozcan un poquito mas.

Un beso fuerte para todos.

Para terminar me gustaría que supirais que Nieves está publicando una nueva historia en su blog personal. Si queréis echar un vistazo pinchad AQUÍ