MIS MEJORES LECTURAS DE 2014.
Supongo
que, a estas alturas, estáis igual de empachados de listas con ‘lo mejor y lo
peor del año’ que de gambas, pues bien, yo tampoco he podido resistirme a
compartir mi resumen particular –curiosa tendencia la del ser humano a
clasificar, a ordenar, a puntuarlo todo–. A continuación os enumero mis mejores
lecturas de 2014, las que aún sigo recordando con intensidad, las que me
cambiaron –de una forma u otra–, o las que simplemente me entretuvieron más y
mejor. Tirando sólo de corazón, que al final es lo cuenta, éste es mi Top 5
(+2) de Mejores Lecturas.
EL DEVORADOR DE CALABAZAS, de Penelope
Mortimer. Hay libros que son como azotes (literarios) y éste es uno
de ellos: aún me miro la marca que me dejó y me asombro, porque me encantó. El
retrato de la protagonista, como una madame Bovary moderna o una Betty de Mad men, es tan desgarrador y tan
desesperado que lo hace adictivo; y encima está inspirado en la vida de la
autora. Lo dije en la reseña: hay algo en este libro que me desestabilizó,
quizás fue que me reí a carcajadas con la infelicidad de esta mujer. Puede ser.
Si lo que queréis es un buen azote (literario), éste es vuestro libro.
LA RIDÍCULA IDEA DE NO VOLVER A VERTE, de
Rosa Montero. Sí, este libro va sobre ausencias, duelos y
dolores, pero Rosa Montero lo cuenta con tanta elegancia y con tanta lucidez
que es imposible no sentirse removido. Igual que hay veces que se ama con el
estómago, esta historia se lee con las tripas, con ese hueco que hay detrás de
las costillas. Uniendo su experiencia a la de Marie Curie, que escribió un
diario tras la muerte inesperada de su marido, arma una novela-ensayo tan
cargada de verdad que permanece. A veces me descubro releyendo párrafos.
ESCRIBIR, CREAR, CONTAR, del Instituto
Cervantes. Para alguien, como yo, que no es capaz ni de comerse una
tilde escribiendo por Whatsapp, era imprescindible meter en esta lista una guía
completa y madura sobre cómo escribir bien, contar historias y transmitir con
eficacia. Mateo Coronado es el autor de esta especie de taller en casa, en el
que te desvelará las herramientas y los trucos de los mejores escritores de la
historia. Imprescindible para cualquier que ame la literatura. Si quieres ser
escritor y todavía sigues diciendo “Tenía el pelo rubio como el trigo”, lo
necesitas.
EL GRAN FRÍO, de Rosa Ribas y Sabine
Hofmann. ¿Os acordáis de la película El resplandor, de Jack Nicholson? Pues esta novela, ambientada en
una aldea perdida de los años cincuenta, tiene también algo de claustrofóbica,
de que se le acaba el oxígeno, como si no hubiera ventanas por ninguna parte.
La ambientación de la historia, en la que se investigan los estigmas sangrantes
que le han aparecido a una niña, es magistral, un reflejo escalofriante de la
España que fuimos.
ASTRID Y VERONIKA, de Linda Olsson. Ya
sabéis mi tendencia al Slow Reading, a zambullirme de vez en cuando en esas
historias en las que aparentemente no pasa nada, donde lo importante no es la
acción sino la casi imperceptible transformación de los personajes. Esta autora
tiene un don especial para narrar lo cotidiano, para fijarse en los detalles y
para diseccionar los sentimientos de diario. Esta novela es como un retiro en
el campo, sin móvil y sin internet. Deliciosa.
Y
también están, aunque aún no he compartido la reseña –las tendréis en breve-
estas dos joyitas, bueno sin diminutivo: joyas.
LA HONDONADA, de Jhumpa Lahiri. Adoro
a esta escritora desde su libro de relatos Tierra
desacostumbrada: leedlo, leedlo, leedlo. Su última novela, donde se cuenta
la historia de dos hermanos indios, es simplemente fascinante. Sus virtudes son
muchas: su enorme sensibilidad, el exquisito uso del lenguaje, la solidez de
los personajes… ¿Qué os voy a decir yo de una de las niñas favoritas de la
literatura? Adorad, por favor, vosotros también a Jhumpa Lahiri.
LA HABITACIÓN DE INVITADOS, Helen Garner. Con
qué buen sabor de boca acabo el año. Esta novela corta es todo a lo que un
escritor puede aspirar. Con qué sencillez narra la visita de una mujer a otra,
y los roces que se producen entre ellas. Y sí, casi lloro. Leí toda la historia
casi sin poder tragar, como si tuviera una bola de pelo en la garganta. No os
digo cuántos ejemplares he comprado para regalarlos. Esta historia tiene algo
mágico, algo que sólo ocurre una vez cada cierto tiempo, como la voz de Whitney
Houston.
Y para vosotros, ¿cuáles han sido las mejores lecturas de este año?
Feliz 2015. Nos leemos.
No conocía ninguno pero me los apunto :)
ResponderEliminarUn beso
Hola! No he leído ninguno pero La ridícula idea de no volver a verte me ha llamado la atención así que apuntado queda ;) Un beso!
ResponderEliminarMuchas gracias por los consejos literarios Dani!!! los tendré en cuenta por supuesto..... y a ver si algún día podemos comentarlos juntos...Un besazo. ....
ResponderEliminarNo he leído ninguno aún pero los tendré muy en cuenta.
ResponderEliminarBesotes y feliz año!!!