Heraldos de la luz

Hola a todos. Hoy os traigo la reseña de una novela que leí hará casi un mes, pero por cuestiones de tiempo no he tenido tiempo de ponerme a ella. Se trata de Heraldos de la luz, de Víctor Conde y publicada por Editorial Hidra.

Mientras la batalla entre el Cielo y el Infierno llega a su punto culminante, tres jóvenes elegidos viven sin ser conscientes de su auténtico destino. Tanya compite en un concurso de talentos para demostrar que tras su look de Lolita hay un cociente intelectual muy superior a la media. Erik actúa como doble en las escenas más arriesgadas de una película de acción. Y Mauro subsiste como un scene inadaptado.

Una misteriosa joven llegará para advertirles de que corren peligro, y pronto Tanya, Erik y Mauro serán testigos de cómo el choque entre Luz y Oscuridad comienza a cobrarse víctimas de una forma terrible.

En esta novela nos encontramos la típica lucha del bien y del mal, y como protagonistas de las historia a unos aprendices de ángeles que deberán pasar unas pruebas para demostrar su valía. Para llevar a cabo esta misión tenemos a Séfora, el ángel que se encargará de buscar a los elegidos, aunque no estará sola, ya que hay una especie de espíritu encerrado en un espejo que será como su Pepito Grillo. Séfora es un ángel muy especial, pues parece tener unos vicios que la hacen más humana que divina (fuma, bebe cerveza y tiene muchas dudas sobre su misión).

Séfora encontrará en primer lugar a Tanya, una joven superdotada que parece tener una vida feliz junto a su familia. Todo cambia de forma traumática una noche en la que aparecen unos demonios en su casa y Tanya es salvada por Séfora. Es una chica fuerte, decidida y con las ideas muy claras.

El segundo elegido es Erick, un especialista de cine que vive sólo para en sí mismo. Es joven, le gustan demasiado las chicas, la juerga y no está dispuesto a comprometerse con nadie. Es impulsivo y un tanto arrogante, aunque esto no es más que una pose. Y por último tenemos a Mauro, un chico triste, apático, depresivo y que parece sufrir por el dolor que hay en el mundo. Ha tenido un pasado demasiado duro y esto marcará mucho su futuro. Para mí este personaje es toda una incógnita, que estoy segura que el autor nos sorprenderá en las dos próximas entregas.

Con estos tres aprendices a ángeles nos adentramos en una historia dónde los protagonistas están muy bien definidos y dónde cada uno tiene su papel. El poder que parece desarrollar Tanya no será el mismo que tendrá Erick o el que tendrá Mauro. Hay una reinterpretación de mitología angélica.

Si hay algo que me ha sorprendido de este autor es la manera de narrar. Puede parecer muy sencilla, y a la vez con la palabra precisa en cada párrafo. Y digo sencilla cuando no lo es. Para llegar a esta maestría ha tenido que trabajar mucho para escribir con esa facilidad que parece tener su pluma. Y aunque la obra mantenga un buen ritmo durante toda la historia, en algunas ocasiones parece flojear.

Quizás lo único que no me ha gustado es el que el autor soltara alguna perla (porque en este caso es una opinión muy personal) como que los libros de Dan Brown o de Stephenie Meyer estaban en el infierno. Me ha parecido pretencioso por su parte, aunque yo no sea muy amante de las novelas de Dan Brown. Por lo demás, he disfrutado mucho con esta historia y espero las siguientes entregas para saber qué les ocurrirá a estos protagonistas tan peculiares.

Con la colaboración de Editorial Hidra.

Próxima reseña: La canción del silencio.