La isla del dhaphiro

Hola a todos. Hoy os traigo la reseña de una novela autopublicada. Se trata de La isla del dhaphiro, de Dianna Marquès. Como he comentado es una novela autopublicada, y esto supone para el autor un riesgo muy importante que no tienen las ediciones tradicionales. En este riesgo no todo tiene que ser malo, pues puede dar una idea al autor de la acogida de su historia con un público potencial. También tiene una cosa buena esta manera de llegar a los lectores, que es una historia que puede admitir cambios en el caso de que un editor se interesara por ella.

¿Y si el amor verdadero no fuera un mito?

La vida universitaria no es fácil para un dhaphiro, y Jayden está a punto de descubrirlo. Nuevos amigos, extraordinarios desafíos, emociones descontroladas y una intensa relación con una chica muy especial agitarán su mundo, a la vez que se reencontrará con su pasado, personificado en una aterradora y poderosa figura, que pondrá en peligro todo lo que conoce y ama.

Una de las cosas que más me llaman la atención de esta autora es su esfuerzo por hacer llegar su historia al máximo de lectores posibles. En este sentido, Dianna tiene mucho ganado porque sabe hacer llegar un mensaje muy claro. Es autora, tiene una historia que parece gustar y quiere publicar en una editorial convencional. ¿Qué problemas puede haber para que esto no sea un sueño? Un editor que vea el potencial de esta novela, apueste por el trabajo de Dianna y resuelva todas sus dudas como autora.

La novela tiene una buena presentación, y en esto se nota que Dianna ha trabajado mucho para ofrecer un buen producto. Tiene una portada maravillosa, un buen diseño y una maquetación impecable.

En la isla del daphiro nos encontramos con casi todos los personajes que salían en Alma inmortal, aunque aquí se centra en la historia de Jayden. Atrás quedaron sus años de instituto y la autora nos muestra a un Jayden universitario. La vida diaria no será como él espera. Sufrirá varios contratiempos, lo que desembocará en que Jayden se acerque a ese lado oscuro que tanto teme. También ha perdido la virginidad y, al parecer, es un amante bastante satisfactorio.

Por primera vez Jayden comienza a mentir, a esconder sus verdaderas intenciones y a no confiar ni en su madre ni en Galatea. Vemos el lado más oscuro de un Jayden al que siempre se le ha considerado como un joven educado y que no suelta una mala palabra por su boca. Sin embargo, Jayden conoce a una chica que hará replantearse muchas cosas.

Esta es una historia de vampiros, aunque con otro enfoque. Jayden no es exactamente un vampiro, es un dhaphiro, (hijo de vampiro y un humano). Tiene muchas características de estos seres inmortales, pero como dhaphiro posee peculiaridades que lo alejan del vampiro. Para mí esto es uno de los rasgos más originales de esta historia.

Sigo pensando que es una buena historia y que la autora se esfuerza por crear un mundo muy particular. También puedo percibir la sensibilidad que tiene Dianna a la hora de plasmar las diferentes escenas que hay en esta trama. No sé si es bueno o es malo implicarse tanto con los personajes, ya que a veces no te dejan ver la historia con un poco de perspectiva.

Una dificultad que le he encontrado es que en ocasiones no profundiza un poco más en algunas escenas, así como en algunos datos que quedan un poco a la imaginación del lector. En este sentido creo que a las escenas más íntimas les falta un poco más de chicha (no tiene por qué ser necesariamente escenas explícitas) para poder encuadrar esta historia dentro del género de romántica-paranormal adulta. También profundizaría un poco más en el pasado de Eilean y por qué es tan reservada (posee un don), cuando parece ser que es una chica querida por su abuela y sus padres. Me hubiera gustado saber más de ciertos momentos, como el detalle de la fotografía, o el vínculo que le unía a Eilean con su abuela.

Yo, desde luego, no la englobaría dentro del género de ciencia ficción. De la manera que la ha presentado Dianna está a medio camino entre el género juvenil y el adulto. Esto lo digo a la hora de presentarlo a un editor, pues al fin y al cabo, lo que quiere ya no es solamente una buena historia, que ésta lo es y además, con mucho potencial. Un editor también desea vender un producto muy determinado, y por lo tanto es fundamental, que como autores, tratemos de concretar mucho a qué público va dirigida nuestra obra.

En fin, espero que Dianna tenga una oportunidad. De la anterior novela a ésta percibo que ha mejorado su estilo, y estoy segura de que con el trabajo de un editor podría quedar una historia redonda.

Próxima reseña: Penitencia