El arte del pastel perfecto, Sarah Vaughan

SINOPSIS: Kathleen Eaden fue la imagen de la próspera cadena de supermercados fundada por su marido. Con sus deliciosos dulces y su apariencia de ama de casa perfecta, se convirtió en símbolo de la vida familiar en muchos hogares. Ahora, después de su muerte, la cadena Eaden’s busca a un nuevo representante de la marca a través de un concurso de repostería.

Los cinco participantes que pasan a la fi­nal no podrían ser más diferentes entre sí, igual que lo son sus motivaciones para concursar. Tenemos a Jenny, que se enfrenta a su casa vacía ahora que sus hijas son mayores; a Claire, que sacrifi­có sus sueños para criar a su hija; a Mike, viudo y padre de dos niños; a Vicki, que lo dejó todo para quedarse en casa con su hijo, y a Karen, que no está dispuesta a mostrar ninguna ­ sura en su apariencia brillante.

A medida que avanza la competición, el nivel de exigencia aumenta y los concursantes deberán esmerarse cada vez más y preparar ante las cámaras todo tipo de deliciosas recetas, al tiempo que profundizan en la leyenda de Kathleen Eaden, cuya aura de perfección, descubren, también tenía sus imperfecciones.

¿Quién conseguirá ser la nueva imagen de la marca Eaden’s?

Como bien dice la autora: ¡Qué triste sería la vida sin dulces! Pero esto ya lo cantaba Mary Popins en la película de Disney: Con un poco de azúcar esa píldora que os dan, la píldora que os dan... pasará mejor. Ante tal afirmación yo sólo puedo darle la razón, aunque con moderación. Ahí está la clave de una buena alimentación, que bien se podría trasladar a nuestras vidas; porque a fin de cuentas, lo que todos buscamos es el equilibrio: un poco de sabor dulce, algo de salado, una pizca de amargo y un chorrito de ácido.

Estamos viviendo el auge de los gastro-concursos televisivos. Esta semana terminaba Master Chef y, para aquellos que hemos seguido el programa, nos hemos quedado con la cantinela de: Pónganle sabor a la vida. Y esto es justamente lo que hace la autora de esta novela: ponerle color y mucho sabor dulce a las vidas anodinas de estos cinco concursantes.

La autora relata la historia sobre seis personas y sus circunstancias (cinco concursantes, aunque también conoceremos a la mujer en la que se inspiran los creadores del concurso televisivo), y cómo el arte de la repostería les cambia la vida para mejor.

A este concurso llegan a la final cinco participantes de diferentes clases sociales y de edades dispares. A todos ellos les une la pasión por la repostería y también el hecho de querer cambiar aspectos de sus vidas con las que no están contentos. Todos tienen algo que esconder y que iremos conociendo conforme el concurso va avanzando.

Sí que es cierto que los personajes pueden pecar de clichés (Jenny, el ama de casa que ve que ya no le importa a su marido; Vicki, la madre joven y soltera que sacrificó sus sueños para criar a su hija; Karen, la perfecta ama de casa que ahoga sus penas con el sexo con hombres jóvenes; Claire, la mujer que sacrificó su carrera laboral por criar a su hijo y atender a su marido; y Mike el viudo que se siente solo), pero es que los clichés son eso, clichés, y si están bien definidos, no me importa. En esta novela todos están muy bien perfilados y sabes perfectamente cuándo habla uno u otro.

Además de conocer a estos cinco participantes, la autora ha sabido introducir desde el inicio de la novela, la historia de Kathleen Eaden, la mujer perfecta que levantó junto a su marido un gran negocio de cadenas de supermercados, y que logró escribir una serie de libros de repostería. A lo largo de la novela vamos viendo que todo lo que se creía de ella no era más que una gran mentira, que su vida no era tan idílica y que había algo que ella deseaba y que la haría mucho más feliz que la repostería.  

Como si de un concurso se tratara, el lector siente la necesidad de saber cómo va a acabar y quién terminará por llevarse el premio. La autora va mezclando las diferentes historias personales de cada personaje como si de una receta se tratara.

Para ir acabando, El arte del pastel perfecto es una historia de superación, y cómo una competición sobre repostería puede cambiar la vida de estas cinco personas. Un libro que nos hace reflexionar sobre lo que es importante en la vida, para aprender a valorarse a uno mismo, y si esto lo haces mientras cocinas un pastel, mucho mejor. Porque, ¿qué sería de nuestra vida sin dulces? Por mi parte sería muy mustia.