Donde los árboles cantan

Hola a todos. Hoy vuelvo a la carga con la última novela que he leído, Donde los árboles cantan, de Laura Gallego y publicado por SM.

Viana, la única hija del duque de Rocagrís, está prometida al joven Robian de Castelmar desde que ambos eran niños. Los dos se aman y se casarán en primavera. Sin embargo, durante los festejos del solsticio de invierno, un arisco montaraz advierte al rey de Nortia y sus caballeros de la amenaza de los bárbaros de las estepas... y tanto Robian como el duque se ven obligados a marchar a la guerra.

En tales circunstancias, una doncella como Viana no puede hacer otra cosa que esperar su regreso... y, tal vez, prestar atención a las leyendas que se cuentan sobre el Gran Bosque... el lugar donde los árboles cantan.

Viana es una joven que sueña con tener una vida parecida a las de las damas de las novelas de caballería que lee. Desea seguir con su apacible vida sin complicaciones, reírse con su amiga Belicia y casarse con Robian, caballero con el que está prometida desde pequeña.

Se acerca la fiesta del Solsticio de invierno, donde Robian será armado caballero en las justas, y Viana podrá abrazarlo de nuevo… Pero todo cambia cuando, a pesar de las advertencias de un montaraz, los bárbaros invaden Nortia y obligan a las mujeres a cumplir sus obligaciones.

Pero Viana cuenta con la ayuda de Dorea, una mujer de armas tomar, para rebelarse contra su destino. Y es así como Viana comienza un camino desconocido en su proceso vital y se convierte en un símbolo de rebelión para todos aquellos que luchan contra los bárbaros. Y en este caso, el sobrenombre de “bárbaros” es muy acertado.

En algunas ocasiones puede parecer, en este proceso de maduración de Viana, como una niña caprichosa, pero yo no lo veo así. Encuentro que es impulsiva y apasionada, como casi cualquier chica de dieciséis años. Hay una escena al principio con Robian que da una muestra de quién es Viana, un beso que muestra mucho del carácter impetuoso de este personaje.

Hay otros personajes que me han gustado bastante, como Lobo. Cada vez que surgía la historia de cómo y por qué había perdido la oreja era como un cuento dentro de la trama. Estas pequeñas historias me han parecido muy curiosas que tienen un cierto parecido a los cuentos que narran los juglares. Lobo es un personaje clave en la evolución de Viana, el que la enseñará a coger un arma, el que le enseñará a que piense antes de actuar y el único que se atreverá a decirle lo que piensa de ella.

Sin embargo hay un personaje muy interesante en esta novela, que sale a mitad de historia: Uri, el chico misterioso del bosque, que cambiará los esquemas de Viana. Uri es ternura, es ese como niño al que se le tiene que enseñar todo, es la inocencia personificada. Me robó el corazón desde el primer momento, pero no solamente me lo robó a mí…

En esta ocasión la trama no se centra tanto en la parte fantástica como en otras novelas, pero hace mención de un elemento fantástico de algunos cuentos que hemos escuchado de pequeños. El misterio está en el bosque… Donde los árboles cantan, un lugar para quedarse y escuchar la melodía de sus seres.

También me gustaría hablar de la edición tan cuidada, de los detalles que encontramos en ella, de las frases en cada capítulo que adelanta un poco la acción, en fin, todo lo que me gusta encontrar como lectora en las novelas.

Si hay algo que me gusta de esta autora es la manera de narrar, de integrar perfectamente los diálogos en la narración y de que todo fluya. Y es que Laura lleva muchos años dedicándose al arte de escribir, porque lo que hace Laura es un arte.

Con la colaboración de SM

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