Olas Salvajes

Serafina, Neela, Ling, Ava, Becca y Astrid, seis sirenas de diferentes reinos de los mares y las aguas, han sido convocadas por las iele, un clan de brujas de río, para darles a conocer un secreto. El antiguo mal que destruyó el imperio ha regresado, y sólo las sirenas podrán derrotarlo. Para hacerlo, tendrán que encontrar los talismanes de los Seis.

 En esta segunda entrega volvemos al mundo de las sirenas Disney. Como ya os dije en la primera reseña, uno de los puntos fuertes de esta aventura bajo del mar era lo onírica y atractiva  que podía resultar esa revisión libre de La Sirenita. No voy a negar que el estilo simple y  esas pretensiones de aventura épica hayan hecho que pierda el interés por esta saga, pero hay que decir que esta serie está orientada a un público de más corta edad, cosa que ha hecho que la lectura me supiera a poco.

               Pese a que la sinopsis habla de varias sirenas, esta saga se centra en dos Seraphina y Neela dos pececillas con caracteres totalmente distintos, pero con un mismo fondo, algo muy característico de las aventuras y política Disney.

               Entrar en el nudo de esta historia, sería como intentar bucear en el Mar muerto. Se cumplen todos los estereotipos de una historia de proporciones épicas. Sirenas que de ser bellas flores se convierten paulatinamente en guerreras del los mares con ansias de una victoria asegurada. A decir verdad, el personaje de Neela  fagocita literalmente a la futura reina Seraphina, esta no termina de evolucionar de una manera lógica, se estanca en esa dualidad entre la valentía y ñoñería, y eso hace que la historia  de tener un comienzo prometedor, evolucione a un nudo que podría denominar en términos marinos “mar revuelto”.

               El amor en esta historia es casi anecdótico, creo que de tener en su primera entrega “cierto” fuste, evoluciona a un sinsentido que no sé a ciencia cierta si se podrá resolver en entregas posteriores.

               Como todos los que leemos y reseñamos libros, sabemos que en algún momento de la saga una historia debe decaer para que siga la progresión lógica en adicción. Esta ha encontrado su decadencia en la segunda entrega, estas sirenas han encontrado una fosa marina  con corrientes que arrastran hacia adentro de la que difícilmente puedan salir a no ser que justifiquen bien ese final tan interesante.