Tengo en mi casa una estantería enorme reservada a libros espirituales, de psicología y autoayuda. Siempre he procurado no cerrarme a nada, leerlo todo sin prejuicios –o con los menores prejuicios posibles– y buscar nuevas herramientas para la felicidad. Y os lo reconozco: algunas lecturas me han resultado fascinantes. Es inevitable creer en algo, o buscar algo en lo que creer: lo hacemos todos los seres humanos. Hoy, en un intento por abrir el blog a otros libros y a otras corrientes, os traigo El poder del corazón, recién sacado por Ediciones Urano, y escrito y coordinado por Baptist de Pape, un abogado que se dedicó a viajar por el mundo con el firme propósito de descubrir el verdadero potencial del órgano más popular del cuerpo, el preferido por los poetas y los enamorados, ése al que hace algunos siglos llamaban la manzana del pecho. Y en esta aventura lo acompañan figuras de primera línea como los escritores Paulo Coelho, Isabel Allende y Maya Angelou, o algunas de las voces más representativas del Nuevo Pensamiento, como Eckhart Tolle y Joe Dispenza, entre otros. Pues bien, hablemos largo y tendido de amor y de amores, de las formas y los disfraces del enamoramiento, y de las habilidades del corazón. ¿A quién no le gusta eso?Este libro es una guía que, desde una perspectiva espiritual y científica, nos revela el verdadero poder del corazón; un órgano que, más allá de su función física, posee su propia inteligencia, intuición y sabiduría. Atender al corazón, entender su lenguaje, descifrar sus mensajes cambiará para siempre nuestra relación con la salud, la riqueza, el destino y el amor. Por encima de todo, nos pondrá en contacto con la voz interior, la única que conoce nuestro auténtico propósito en la vida. Baptist de Pape, el autor, ha viajado por todo el mundo entrevistando a grandes figuras del pensamiento.
Hay frases de las que hemos abusado
tanto que suenan manidas, cursis,
propias de gente poco original, como por ejemplo: “Escucha tu corazón”, “Donde
el corazón te lleve” y todas esas ñoñeces. Pueden parecer ñoñeces, sí, pero no
están faltas de razón. Los participantes en este libro vienen a poner orden en
este asunto porque bucean hasta el fondo y reivindican con seriedad las
funciones del corazón, que van más allá que la de pasarse la vida bombeando
sangre al resto del cuerpo. ¡Su poder es casi un súper poder! Me asombra leer
que, y voy a dar sólo un par de datos, el
corazón responde antes que el cerebro a lo que pasa a nuestro alrededor y
que su campo electromagnético se expande hasta dos y tres metros del cuerpo,
por lo que afecta a los demás y nosotros nos vemos afectados por la gente que
tenemos cerca. Es maravilloso. O inquietante. Aún no lo tengo claro. El
corazón, concluyen estos estudios con base científica –insisto, con base
científica–, tiene una inteligencia más profunda y más arraigada a la esencia
del ser humano que el cerebro, y además, siempre lleva la razón. ¡Toma ya! Sin
embargo, tenemos que salvar un obstáculo, que no es otro que… ¿lo adivináis? La
mente. Leed bien: de los 600.000
pensamientos que tenemos al día, un 80% es negativo o limitador, es decir,
es una voz crítica que no deja de susurrarnos contra nosotros mismos y que nos
llena de miedos e inseguridades, pero este libro nos va a dar las claves para
cambiar esta tónica.
Entiendo que algunos tengáis cierta
reticencia en dejaros aconsejar por manuales espirituales o de autoayuda, pero
hacedme caso: esta guía es como quedar a tomar café con gente triunfadora, gente que ha llegado a la meta que se había
propuesto y que quiere darle un mensaje a la Humanidad. ¿Cuál? Pues que todos
tenemos unos dones a los que podemos sacar partido para nuestro bien y el de la
sociedad. Las claves que nos dan son claras y (relativamente) fáciles: seguir
la intuición SIEMPRE, reservar algún rato de silencio para escucharnos, ser
amable y agradecido con los demás, darnos algún capricho, y hasta relacionarnos
con los animales. ¿Y ahora os preguntaréis si me ha servido este libro? Pues me
gusta saber que todos nos merecemos hacer lo que nos gusta y ser un poco más
felices. ¿Me estoy pasando de cursi?
El
poder del corazón, de Baptist de Pape, es un libro que habla de algo tan
trascendental como vivir la vida para la que hemos nacido, pero no está escrito
desde la teoría, la gravedad o la distancia, sino que está llena de detalles, de
experiencias y de pequeños ejercicios prácticos que nos ayudarán a estar más
contentos. ¡Y eso se contagia! Para los que necesitamos que nos recuerden de vez en cuando que lo importante es el amor, la
felicidad y el propósito, esta guía es un fantástico aliado. Para terminar os
dejo una cuestión que os dará vueltas en la cabeza (y en el corazón) durante
algunas semanas: ya está bien de pedirle cosas a la vida, ¿te has planteado alguna vez qué quiere la vida de ti?
PS: Y
sí, me gusta que me hablen de milagros, de coincidencias y de casualidades que
no son casualidades.
PS: La
gente feliz vive nueve años más que los quejicas o los depresivos.
PS: En
este libro se plantea algo que me encanta, eso de ser ‘coquetos por dentro’.
Holaaa!
ResponderEliminarNo conocía el libro, pero no me llama la temática.... Eso si, la reseña me ha encantado.
Un besito, nos leemos^^
Buenas tardes! Ah, feliz año. Un beso. Dani.
EliminarPues no sé si me gustaría mucho o no, pero es cierto que me llama
ResponderEliminarsoy alguien un poco espiritual, y muy de darle al coco, pensar, soy una floja sentimentalista emocional... e intento ser feliz, así que me lo apunto
Muchas gracias por la reseña!
un besito
Ya somos dos que estamos dándole siempre al coco... Gracias por pasarte. Un besito fuerte. Dani.
EliminarNo es una temática que me llame muco así que lo dejo pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡Feliz año nuevo! Un beso fuerte. Dani.
EliminarPfff, este tipo de libros me llaman según la época en la que me encuentre. Y ahora mismo no es una de esas épocas, aunque igual si lo veo en la librería me lo pienso para leerlo, aunque sea, por rachas.
ResponderEliminarUn besito.
Buenos días... Sí, tienes razón, estos libros dependen mucho del momento personal en el que estemos. Un beso fuerte. Dani
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