Oliver Nocturne

Hola a todos. Hoy os traigo la reseña de un libro juvenil, fresco y que me ha gustado bastante. Se trata de Oliver Nocturne, de Kevin Emerson y publicado por La factoría de ideas. Oliver Nocturne, Asesinato a pleno sol es la segunda entrega de esta saga.

Os recuerdo que hay un concurso activo en el blog para llevaros esta novela. Si queréis saber más AQUÍ. Tenéis hasta el 28 de Agosto para participar.

Sinopsis de la contraportada.

Oliver está convencido de que ha perdido a los únicos amigos de verdad que ha tenido nunca: Emalie y Dean. Pero entonces Dean regresa, aún muerto pero transformado en zombi, y no parece guardarle ningún rencor. ¿Quién ha traído de vuelta a Dean y por qué? ¿Y qué está ocurriendo con Emalie? ¿Podría estar tras los asesinatos de varios jóvenes vampiros? Oliver y Dean deben descubrir la verdad antes de que el propio Oliver sea liquidado y convertido en polvo.

Una de las primeras cosas que me llamó la atención de esta novela fue la portada. No había leído la primera parte, pero tampoco fue un inconveniente para comprender esta historia. El autor se encarga de recordar al lector qué ocurrió en la anterior entrega.

El protagonista de esta serie de novelas es Oliver Nocturne, un vampiro que fue convertido cuando nació. En sus aventuras le acompañarán Dean y Emalie, dos amigos muy peculiares. Dean ha regresado de entre los muertos convertido en zombi, y Emalie parece tener una serie de poderes ocultos.

Los padres vampiros de Oliver parecen guardar algún que otro secreto, y su hermano Tormento le hace la vida imposible, pues sabe perfectamente cómo ocurrió la muerte de Dean. Tormento desea poder contar a todo el mundo que Oliver no es el héroe que todos creen que es; Oliver es una estafa y no es merecedor de llevar el apellido Nocturne.

A partir de aquí Oliver intentará averiguar qué ocurrió la noche en la que su amigo Dean perdió la vida y quién lo ha llamado para que regrese. Como zombi, Dean le debe obediencia a aquel que le despertó de la muerte.

Dean se comporta como si nada hubiera ocurrido con Oliver, pero éste tiene remordimientos, pues piensa que mató a su amigo. Y aun así parece que la amistad entre estos dos amigos sigue siendo sólida. En algunos momentos me recordaba a la relación que había entre Harry Potter, Ron y Hermione.

Los vampiros suelen pensar que los zombis son una especie inferior a ellos, y que son un poco idiotas. Dean tiene ese punto, no idiota, pero sí inocente y cándido. Aunque esto no es más que una fachada. Oliver es ese “héroe” que desearía tener una vida sin complicaciones, aunque parece ser que los problemas le persiguen. Y Emalie va dos pasos por delante de Oliver y de Dean para descubrir quién mató a Dean, a pesar de que todos los datos indican que lo hizo Oliver.

Oliver Nocturne es una historia de vampiros, pero tiene elementos que la diferencian de todo lo que conocemos de este género. La familia de Oliver me recordaba a los Monsters, aquella serie de televisión de los años 60, con personajes típicos del terror y con un toque cómico. Así he visto a Polemonia, una madre vampiro, un poco más retorcida que Lily Munster, y preocupada por sus dos hijos y su marido.

Esta historia es fresca, divertida y muy ágil. Es cierto que está enfocada a un público más juvenil, pero yo me he divertido con esta novela. No me importaría que el autor profundizara un poco más en el pasado de Oliver en las siguientes entregas, pues el pasado de este vampiro da mucho juego.

Con la colaboración de La factoría de ideas

Próxima reseña: La ciudad esmeralda