MEJORES LECTURAS DE 2015
Típico de Navidad: Las
castañas asadas, las colas en las tiendas, la subida del precio de los
langostinos y también la lista de lo mejor de 2015. Éstos son las lecturas más
apasionantes (y más apasionadas) con las que me he topado este año.
Y aquí van:
ADULTOS
Una
chica en invierno. Una joven desganada recibe una carta donde se
entera de que va a recibir la visita de un amor de adolescencia. Esta historia
narra un día en la vida de la protagonista, y en ese día está toda su vida. Una
historia construida en los detalles que nos habla de la desgana y el deseo.
Instrucciones para una ola de calor. Durante una tremenda ola de calor, desparece un anciano. La familia se reúne para su búsqueda y es ahí cuando salen a flote los recuerdos y las rencillas. Una historia pausada, sin prisas, pero de una contundencia incontestable. Esta novela se pega a la piel como el sudor de una tarde de verano.
Y tú no regresaste. Esta novela corta –no tiene más de 100 páginas- donde se recogen los recuerdos, las impresiones y las heridas de una superviviente al campo de concentración es demoledora. Fue detenida junto a su padre, pero sólo sobrevivió ella. Lo más duro es la incomprensión, cuenta: “Olvídate ya de las penas”, le decía la madre. Terrible.
Palabrotalogía. Me divertí mucho leyendo este tratado sobre las palabrotas en castellano. Aprendimos que la mayoría proviene de la antigua Roma y fue, además, la última reseña en la que me desahogué con insultos. Coño, puta, cojones, carajo, verga, follar… Y qué bien se siente uno después de escribir esto. ¿Sabíais, por ejemplo, que escroto significa bolsa de piel, grande se traduce como bellota y fimosis es amordazar?
La
solitaria pasión de Judith Hearne. La historia de esta solterona
que lo único que quiere es enamorarse era tan triste como patética y nos
enfrentaba a una de las historias más hirientes que recuerdo. El personaje
principal es una delicia y nos obliga a platearnos un debate doloroso: ¿cómo se
vive cuando no se consigue lo único que uno ansía?
La
cigarra del octavo día. Esta historia sobre una mujer que rapta a
la hija recién nacida de un antiguo novio me dejó tocado durante varias
semanas. Su dureza, su estilo delicado y el aplomo con el que está narrado le
dan méritos suficientes para colarse en mis mejores lecturas de 2015. Es uno de
los libros que volveré a leer pronto. De eso estoy seguro.
El
balcón en invierno. Dos de mis temas favoritos mezclados en esta
especie de diario en el que Luis Landero intenta averiguar el inicio de su
vocación por la escritura. Literatura y posguerra, juntas en este catálogo de
recuerdos, que se leen casi sin darnos cuenta. Un ejercicio de memoria
delicioso
Marga. Me he enamorado de Juan Ramón… y
siendo tu amiga… le he dicho que le quiero… y le he pedido que se case conmigo…
¡estaré loca! (…) perdóname… porque si me hubiera dicho que sí… ¡ay!... a pesar
de que la idea de la amistad para mí es sagrada… yo habría pasado por todo».
Con estas palabras confesaba su amor hacia el poeta Marga, una protegida de
Juan Ramón Jiménez y su mujer, Zenobia Camprubí. Marga, esta joven que terminó
suicidándose, nos enseñó a no juzgar a los enamorados. Su diario es
estremecedor y de una sinceridad apabullante. Nos dimos cuenta, además, de lo
bien que escribía la mujer del Premio Nobel porque una parte de este libro está
escrito por ella.
JUVENIL
Constable
& Toop. Lo leí en febrero y aún me recuerdo
absolutamente maravillado por esta historia de fantasmas en la Inglaterra
victoriana. Una trama estimulante, un estilo pulido y unos toques de humor
deliciosos. Es el libro que me hubiera gustado leer siendo niño. Si no le caes
bien a tu sobrino, esta novela es una buena forma de ganártelo.
Dead7.
Una
novela juvenil potente, bien escrita y con mucha mucha sangre. Anabel Botella
–hola, Anabel– conseguía angustiarnos a todos con esta historia claustrofóbica
en el que un grupo de jóvenes quiere conseguir un bote de 1’7 millones de
euros. ¿Participarías aunque eso pusiera en peligro tu vida? La autora tiene la
respuesta y se confirma con una de las escritoras españolas con más pulso.
Bajo
el paraguas azul. Elena Martínez Blanco, profesora y escritora,
firmó una de las novelas juveniles más valientes de este 2015 al hablar sin
tapujos y sin medias tintas del ciberbullying. Glauca le manda una foto en
paños menores a su novio… y terminan recibiéndola todos los alumnos. ¿Cómo se actúa
en estos casos? Es un libro que salva, uno imprescindible.
¡Hola!
ResponderEliminarSí, sí, muy típico de estas fechas hacer los tan ansiados TOP TEN ^^ Yo aún no he hecho el mío pero es que es difícil elegir :') De las novelas que mencionas tengo pendientes Dead7 y Bajo el paraguas azul ^^
Espero que el 2016 nos traiga más y mejores lecturas :) ¡Besos!
Pues no he leído ninguno... Y varios me llevo apuntados, que es difícil no sentirse tentada con la pasión con la que hablas de estos libros.
ResponderEliminarBesotes!!!
Y tu no regresaste me apetece un montón.
ResponderEliminarBesos